CONTRA EL SECESIONISMO CATALÁN. 10 tesis sobre la familia nacionalista en Cataluña




CONTRA EL SECESIONISMO CATALÁN
10 tesis sobre la familia nacionalista en Cataluña

(Actualizado Diciembre 2013) 





Introducción


El problema del secesionismo catalán se resuelve derrotándolo en las urnas, no haciéndoles concesiones políticas u otorgando privilegios fiscales a Cataluña  

Mis 10 tesis sobre la familia de fuerzas políticas nacionalistas en Cataluña son formuladas como aportación para crear un discurso y una estrategia tendentes a debilitar la influencia de dicha familia política y lograr su minorización en las urnas. La solución al problema del secesionismo catalán vendrá mediante su derrota electoral, no haciéndoles concesiones políticas u otorgándoles privilegios fiscales ‘a la vasca’ que deben suprimirse para los que ahora los tienen no extenderse a otros. Otorgar por presión de los gobernantes nacionalistas privilegios fiscales a Cataluña -sobre ser injusto y disfuncional para el conjunto de España- supondría premiar la deslealtad.

Además darle carnaza a la fiera solo la fortalece. Sabemos que cuanto más favores logren los secesionistas más pensarán (o dirán) que es porque han sido fuertes para imponer al Estado que les entregue ‘una parte de lo que les pertenece’ y enseguida más arreciarán en la lucha por conseguir su objetivo final. La prueba de que otorgar privilegios económicos a Cataluña no la integraría más en España es la propia Vasconia, que es secesionista a pesar de ser privilegiada. Se trataría realmente de privilegios. Por ello injustos hacia las otras comunidades, las leales, especialmente hacia las más pobres que serían las más perjudicadas por una actuación de ese tipo. Pues lo que se haría finalmente, ante la imposibilidad práctica de favorecer solo a Cataluña (extender sin más a Cataluña el modelo vasco provocaría una verdadera insurrección en el resto de España), sería favorecer a todas las comunidades ricas frente a las pobres. A costa de perder recursos el Estado, peligrosamente, pues arriesgaría no poder cumplir adecuadamente sus funciones por anemia. Que es lo que resulta cuando se quiere que ganen recursos todas las comunidades aunque sea desigualmente. 

La reforma ‘catalana’ de la financiación autonómica española de 2009

Ya se hizo así en la última reforma de la financiación autonómica, la de 2009, que comportó brutales cesiones de impuestos estatales a las comunidades. Tal reforma favoreció a Cataluña y también a las otras comunidades ricas. Surgió de la complicidad socialdemócrata de Zapatero con Montilla -entonces presidente autonómico catalán- a favor de Cataluña y fue conocida como ‘catalana’. ¡Hasta la celebró ERC que casi la consideró mérito suyo, porque logró arrancar para dar su consentimiento una concesión de última hora!. El conseller de Economía de Montilla, Castells -entonces el más caracterizado submarino’ de CiU en el PSC (que Montilla no quiso que repitiera como nº2 de su lista), Nadal todavía era 'martillo de herejes'- recriminó a ERC que presumiera de ello.

No solo la reforma de 2009 fue un logro importante del PSC para Cataluña, sino que estuvo más de una vez a punto de fracasar y de perder el PSC su mérito por el descarrilamiento de la negociación propiciado por CiU. Se trató de una durísima negociación durante muchos meses del representante de Montilla, Castells, primero con el Solbes y después con la Salgado, que solo salió adelante por el empeño de Montilla. Pues el intratable negociador que fue Castells (que llevó a Zapatero al borde de un ataque de nervios) en el fondo prefería que la negociación fracasara, como le dictaba el interés de CiU -de la que era agente oculto- temerosa de que el PSC pudiera apuntarse un serio tanto con la misma. 

Más tarde, cuando CiU por táctica negó todo valor a lo logrado con ese acuerdo, Castells nunca salió a la palestra a defender el logro que había obtenido. Eso que incrementaba como nunca antes la financiación de Cataluña, dejando pequeñito al acuerdo anterior, esto es, el de Jordi Pujol con Aznar -del que tanto presumió Pujol- que se limitó a la cesión del 15% del IRPF a las comunidades. Naturalmente a todas, pero que solo beneficiaba a las ricas entre ellas a Cataluña. ¿Ya no piensa el PSC que consiguió para Cataluña 'la mejor financiación de la historia', muy difícilmente superable?  No estamos como para debilitar al Estado, avanzando más por esa senda. 

La ordinalidad, idea necia

Olvídense todos de la 'ordinalidad', es decir, que si Cataluña contribuye la 3ª por habitante (p.h.) a la Hacienda (por su nivel de riqueza) debe ser también la 3ª p.h. en recibir retornos del Estado. ¿Por qué? Primero, que mientras España sea un Estado es imposible aplicar eso de que si Cataluña es la 3ª y Aragón la 5ª en contribuir p.h. sean también la 3ª y la 5ª en recibir p.h. y así las demás comunidades. Las administraciones tendrían que actuar como Estados independientes que se compensaran periódicamente por las diferencias resultantes entre el modelo teórico y los flujos reales. 

Es una mentira goebbelsiana afirmar -como se hace- que Cataluña se vuelve más pobre (con menor PIB p.h.) que comunidades más pobres que ella por el hecho de recibir menor retorno p.h. del Estado que las mismas. Como el señor Botín no se vuelve más pobre que yo por recibir menor retorno del Estado que yo. No pierde Cataluña puestos en el ranking de riqueza por -supongamos- ser 3º p.h. en contribuir al Estado y ser  6º p.h. en recibir del Estado como resultado de la función redistributiva del impuesto. 

La 'ordinalidad' (mantener la misma posición en el ranking como dador y como receptor p.h. en los flujos con el Estado) es inaplicable por su complejidad de ejecución, es entorpecedora de la labor del Gobierno, sustrae a las Cortes la soberanía para elaborar los presupuestos generales y obstaculiza la redistribución. Una idea necia. 


La miopía regional

Cuando hablamos de hacienda siempre asoma el egoísmo. Ni siquiera es justo por sí lo que puedan acordar el conjunto de las comunidades entre ellas. Pues las comunidades pueden actuar con 'egoísmo colectivo' para despojar al Estado a favor de todas ellas. Destruirán de ese modo los cimientos sobre los que viven, pero ese riesgo no lo verán por su congénita miopía para los asuntos de interés común que trascienden sus límites territoriales. Las comunidades territoriales, igual que los partidos regionales, están incapacitados constitutivamente para apreciar el interés general de España y de sus ciudadanos. Por eso son necesarios los partidos estatales, únicos sujetos políticos con visión global y percepción del interés común.  

Pero el egoísmo de un sindicato de territorios no es nada al lado del egoísmo de un territorio singular cuando se siente con capacidad de presión para imponer a todos su visión miope y erosiva del interés general. Una de las versiones de tal actitud es el secesionismo de territorios ricos, que es un fenómeno mas general de lo que se piensa. Igual que sucede en España, con Cataluña o con Vasconia, hay movimientos secesionistas en varios "estados" de los Estados Unidos -que no son Estados en el sentido político actual, pues son entes subestatales- que de tiempo en tiempo plantean una pretensión secesionista (California, es uno de ellos), a los que invariablemente se les contesta institucionalmente que 'la unión (norteamericana) es para siempre'. Esa es la ley del Estado fundado por  Washington y refundado por Lincoln. 

Asombra la petulancia con la que se agita en España por el catalanismo para alimentar la secesión la mentirosa consigna "¡España nos roba!", que -aparte de su dramatismo impostado- simplemente discute lo indiscutible, que es la soberanía del Parlamento español para determinar la ley fiscal en España. Ese "¡España nos roba!" -mentiroso, e insultante para el conjunto de los españoles- ni siquiera es original, pues es simple traducción del lema de la Liga Norte italiana "¡Roma ladrona!". Constituyendo el nacionalismo de la Liga Norte italiana -al igual que el del similar Bloque Flamenco belga- un insolidario 'nacionalismos de ricos' (no es el corso, o el escocés), propio de territorios que se han beneficiado para prosperar de la pertenencia a un Estado y después piensan que las regiones más pobres del mismo (que contribuyeron a su enriquecimiento) representan ‘una carga’ para ellos por lo que desean separarse de su Estado. Tales formaciones políticas son consideradas en toda Europa movimientos de 'extrema derecha'. Mucha suerte tienen las formaciones nacionalistas catalanas (CiU, ERC, CUP) de no haber sido calificadas de ese modo hasta el momento.


Jordi Pujol maestro de despilfarro para toda España  

Es poco señalado que el modelo de gasto público de Pujol fue imitado por las otras comunidades (salvo en lo identitario, que no es diferencia menor), por lo que Pujol resultó el maestro de despilfarro de toda España. ¿De dónde viene el boato general, el que los funcionarios de las administraciones regionales sean mejor pagados que los estatales con menor rigor en su reclutamiento (cuyo origen es la actitud de Pujol de 'fidelizar' a la administración para el nacionalismo), las televisiones regionales ruinosas, o el agujero negro que han supuesto las pérdidas de la maraña de pseudo empresas públicas regionales o municipales? ¿De dónde viene el que un policía que depende de la administración catalana cobre casi el doble que un policía en el resto de España o que uno de un cuerpo estatal que trabaje en Cataluña?

En materia de gasto público el gobierno de izquierda tripartito, de Montilla, no hizo más que seguir la pauta de Pujol y con ERC dentro no iba a reducir el gasto identitario. Lo significativo es que resulta claro que Jordi Pujol buscó deliberadamente que Cataluña gastara sin freno y acumulara una deuda imposible de pagar para que un día todo estallara y produjera una grave situación política que el catalanismo podría aprovechar.


La aplastante deuda catalana

Sin duda la situación financiera de Cataluña -cuya principal problema es la aplastante deuda, de 60.000 millonesE, o cerca de 200.000, superior a su PIB, según se mire- es muy difícil, pues es de verdadera quiebra. Pero de ello solo es responsable Cataluña, ya que ha sido la comunidad española más despilfarradora gastando mucho y mal. Ello fue posible debido al modelo de gasto público creado por Jordi Pujol, con el fin deliberado de 'gastar mucho para poder pedir mucho' al Estado haciendo victimismo diciendo que no llegaba a fin de mes. Lo cierto es que no solo se hizo pedigüeñismo sino que se dejó a deber una parte del gasto del mes. Despilfarro es el término que usó The Economist para referirse al gasto catalán. 

La deuda es difícil de pagar lo mismo para España en su conjunto (con Rajoy ha seguido aumentando, a pesar de las advertencias del 'gobierno económico europeo') como para las comunidades, pero cada uno debe pechar con la deuda que ha producido, siendo normal que las comunidades que más se han endeudado tengan que hacer mayores sacrificios para devolver su deuda; o previamente para reducir el déficit anual que siguen manteniendo, no ya para invertirlo como es necesario para que la deuda comience a disminuir. Mientras existe déficit presupuestario, mucho o poco, por definición la deuda sigue aumentando. 

Es muy extraño que Cataluña -con la deuda que tiene- sea la comunidad que pide usar un déficit presupuestario más amplio cuando eso solo puede hacerle más difícil devolver su deuda, Sin duda ello significa que sus dirigentes no piensan devolverla, Sea porque esperen ser independientes (lo que no se entiende, porque eso no les libraría de la deuda), sea porque esperen que su deuda (o parte de ella) la paguen otros españoles hay que decirlo así. Pero los otros españoles tienen su deuda que no les resulta fácil pagar y nadie tiene que cargar con una deuda ajena. Creo que si se advierte a la Administración catalana de que su deuda la tendrán que pagar como todos, dejarán de pedir déficits 'cómodos'. Con los que se echan una soga al cuello, pues ese camino les llevará de una situacion en la que precisan ayuda a otra en la que tendrán que ser intervenidos. 


Cataluña no está maltratada fiscalmente  

Es falso que Cataluña esté maltratada fiscalmente. Como si los españoles la hubieran elegido para darle maltrato solo a ella, cuando la ley fiscal es la misma para todos. Y también es falso que haya actualmente ninguna deuda pendiente del Estado con Cataluña -tal como lo airea con tono victimista el catalanismo- pues una deuda que no se puede reclamar judicialmente no existe.







10 tesis sobre la familia nacionalista en Cataluña



1ª. Ni CDC (Convergencia Democrática de Cataluña), ni UDC (Unión Democrática de Cataluña), son fuerzas políticas pues no concurren a elecciones. Aunque usen el título de 'partidos' son técnicamente sectores internos de CiU (Convergencia y Unión), la fuerza política cuya candidatura electoral integran, 75% Convergencia y 25% Unión. El programa electoral que defienden (asumido por los dos sectores) es de CiU. El voto se pide para CiU.

El programa de CiU actualmente es secesionista, ya que incluye el objetivo de lograr un 'Estado propio' para Cataluña. Un Estado soberano e independiente, como lo son todos los Estados, pues los entes territoriales descentralizados que integran los Estados federales, denominados en algunos de ellos 'estados' (en los Estados Unidos, por ejemplo) no son Estados políticos y su denominación como estados (terminología no homogénea, de origen histórico) es referida al contexto político interno en el que son entes subestatales. 

Por ello es una mentira 'goebbelsiana' -propaganda ilegítima- que el líder de UDC, señor Durán Lleida, se proclame ‘no independentista’, y lo haga extensivo a la UDC que lidera, siendo así que él es el nº2 de la principal fuerza independentista de Cataluña, esto es, CiU -de la que es su secretario general, cargo compaginable con ser presidente de UDC- cuando CiU es el verdadero motor de la secesión en Cataluña sobre todo a través de su aparato mediático. Una mentira destinada a crear confusión para perjudicar al Partido Popular Catalán, única fuerza de centroderecha no secesionista existente en Cataluña. El señor Durán Lleida desmiente con sus hechos lo que afirma con sus labios. La última muestra de ello es que acaba de dar su conformidad al acuerdo cuatripartito de CiU, ERC, CUP e ICV -adoptado con la presencia en la reunión de sus lugartenientes en UDC, la señora Ortega y el señor Espadaler- que establece unilateralmente la fecha (9 de Noviembre de 2014) y la pregunta del referéndum secesionista que impulsa CiU. Referéndum que figura en el programa electoral de CiU como instrumento para alcanzar el objetivo de un Estado propio soberano para Cataluña.

La primacía de CiU como impulsor del secesionismo es indiscutible. ERC (2ª fuerza catalanista en importancia, que cuenta únicamente con 21 diputados autonómicos frente a 50 de CiU) solo es comparsa de CiU, por su respaldo al plan secesionista que impulsa desde el Ejecutivo autonómico el presidente Artur Mas en base al programa electoral de CiU. 

CiU es la fuerza que ejerce actualmente el gobierno autonómico directo en Cataluña. Aunque aplica un programa de gobierno (adaptación de su programa electoral) cuyos puntos principales fueron pactados por CiU y ERC al configurar la ‘mayoría de investidura’ que hizo presidente a Artur Mas. Tales puntos fueron la realización de una ‘consulta secesionista en 2014' -año acordado en el pacto de investidura, pues en el programa electoral de CiU el referéndum figura para hacer en la legislatura sin fijar año- y la creación de 'estructuras de Estado' en Cataluña dentro de la legislatura. A lo que se añadió un acuerdo de 'estabilidad parlamentaria', que tiene como fin evitar que CiU pueda perder votaciones en el Parlamento autonómico, Especialmente la de los presupuestos (el 'programa de gobierno puesto en cifras'), o la reprobación de Artur Mas mediante una 'cuestión de confianza', o una 'moción de censura'. 

Todo ello convierte a ERC en socio de gobierno externo de CiU. Por lo que constituye una nueva mentira goebbelsiana de la propaganda catalanista el atribuir a ERC un rol de oposición y un acto 'ubuesco' de Artur Mas el haber nombrado al líder de ERC, Junqueras, ‘jefe de la oposición’. Con el fin de crear confusión en perjuicio del PSC (fuerza principal de la oposición, afrentada por esa ilegalidad lesiva para ellos y también para la democracia) y de su líder, Navarro.

2ª. La familia nacionalista en un territorio subestatal la forman el conjunto de las fuerzas políticas nacionalistas. Todas ellas tienen como objetivo común la secesión de dicho territorio. Existen en Cataluña 3 fuerzas nacionalistas parlamentarias: CiU, ERC y CUP. 

También se puede decir que existen 3 fuerzas catalanistas, ya que catalanismo y nacionalismo catalán han devenido sinónimos. El PSC fracasó en crear un catalanismo no nacionalista, pues el significado de catalanismo como sinónimo de nacionalismo lo determina la dinámica nacionalista. Hoy no tiene ningún sentido (salvo para el nacionalismo catalán) mantener un espacio catalanista que abarque al PSC y a los nacionalistas, cuyo único objeto sea excluir de la ciudadanía política plena al PPC y a Ciutadans. Es incluso una grosería intelectual y política. El PSC comparte constitucionalismo con el PPC y con Ciutadans. Eso es hoy mucho más importante que las vaguedades inseguras que comparte con los nacionalistas que han 'salido del armario' como secesionistas.

3ª. Los nacionalistas son antes que nada nacionalistas. CiU, ERC y CUP se enfadan de boquilla pero se entienden bajo la mesa.

4ª. La familia nacionalista catalana es trimembre (CiU, ERC y CUP). Pero quien impulsa efectivamente la secesión es CiU, para lo que utiliza el poder que le da el control directo de los recursos públicos y el monopolio mediático que esa formación política CiU ha creado en Cataluña (el 'cañón' de la secesión), así como la amplia red de complicidades sociales con el secesionismo establecidas por CiU mediante el favor o la coacción. Instrumentos de los que no disponen ERC o CUP, que solo como comparsas (aunque gritones) coadyuvan al fin secesionista impulsado por CiU. 

El único secesionismo preocupante -por su poder y por la resolución de su fanatizado núcleo duro dirigente- es el correoso de CiU, no el estridente de ERC y CUP.

5ª. No haberse preocupado las fuerzas constitucionalistas en Vasconia de visualizar la unidad de la familia nacionalista ha propiciado allí un crecimiento patológico de las fuerzas nacionalistas. No debe cometerse el mismo error en Cataluña.

6ª. Ni el PSC ni ICV -fuerzas de izquierda democrática- son nacionalistas, aunque hayan asumido algún punto del programa nacionalista como la política lingüística de discriminación del español. Supongo que esas fuerzas acabarán revisando tal actitud discriminatoria, contraria al ideal socialdemócrata y perjudicial para los intereses de sus votantes mayoritariamente hispanohablantes. De otro modo esos votantes pueden acabar cuestionando la fidelidad a sus opciones electorales tradicionales. 

Surge en Cataluña una nueva sensibilidad ante la injusticia lingüistica, que no acepta la inmolación del español al interés político de la promoción del catalán, más allá de dar al catalán un trato igual al del español. Por ser el derecho a la lengua de cada uno cuestión inalienablemente personal, no estando nadie obligado a sacrificar ese derecho ante conveniencia política alguna. ExIstiendo hoy en Cataluña -pese a la persecución de que es objeto el español- según la estadística oficial 60% de hispanohablantes (que tienen como lengua principal el español) y 40% de catalanohablantes (que tienen como lengua principal el catalán). 

La persecución del español en Cataluña -muy real aunque la goebbelsiana propaganda nacionalista intente convertir a los verdugos en víctimas- que incluye su prohibición como lengua escolar (lo mismo que hizo Franco con el catalán) y la imposición de multas por su uso para letreros comenciales (cuando no van acompañados de su inútil traducción al catalán, exigencia que no existe a la inversa para los letreros escritos solo en catalán), tiene todos los caracteres de un genocidio cultural. Solo frustrado por la admirable resistencia de las víctimas a su alienación programada. 

7ª. La monja Forcades intenta crear una 4º fuerza nacionalista en Cataluña, que será si el intento se consuma la '4ª pata' del catalanismo que inevitablemente disputará el voto catalanista a las otras 3. Con 4 listas nacionalistas en las autonómicas (CiU, ERC, CUP y '4ª pata' de Forcades), o bien, 2 resultarán extraparlamentarias, o bien, la fragmentación del voto nacionalista convertirá a esas fuerzas en secundarias en relación con PSC, PPC y Ciutadans (e incluso ICV), si las últmas -no como un frente, cada una- saben dar la batalla necesaria contra las fuerzas nacionalistas en su conjunto.

8ª. La CUP (creación mediática de CiU) volverá a ser extraparlamentaria. No hay espacio para 3 fuerzas nacionalistas en Cataluña, bastan CiU y ERC. 

La CUP representa al nacionalismo catalanista más extremo, que usa métodos fascistas y se encubre con una máscara 'antisistema' de pretrendida 'izquierda radical anticapitalista'. ¿'Antisistemas' protegidos por La Vanguardia? Farsantes mamporreros. Los mamporreros del catalanismo.   

9ª. La CUP mostró su carácter fascista cuando el diputado Arrufat amenazó a Albert Rivera en sede parlamentaria con acosos callejeros. No se puede quitar importancia a ese incidente, pues muestra la voluntad de producir amedrentamiento como método político actitud típicamente fascista. Máxime que la CUP -como formación nacionalista- goza de la protección del aparato mediático oficialista que de ese modo potencia su proyección. Hay que lograr la reprobación social incondicionada de ese género de acciones las cometa quien las cometa. Mientras CUP no se redima de ese estigma (pidiendo perdón público por el acoso a Rivera) deberemos considerarlos la rama fascista del catalanismo.

Ninguna tolerancia debe haber en ese terreno. Un diputado que amenaza a otro con acosos callejeros ("Váyase acostumbrando, pues vendrán más", le dijo Arrufat a Rivera cuando éste protestaba por el que le habían hecho aquel día mostrando la hoja de la convocatoria) es un fascista cacterizado que representa a una formación política fascista. No hay que permitir que los catalanistas tengan patente de corso para hacer lo que quieran, incluido amedrentar a ciudadanos para coartar la libertad ideológica.   

10ª. La violencia política (que incluye las amenazas de violencia, los acosos y los pintarrajeos en domicilios particulares o en sedes políticas) siempre es fascista, la use quien la use. Aunque tal tipo de violencia tiene una presencia limitada en Cataluña, significativamente la única que existe es catalanista.